Wonder Woman 1 (Padre y Madre)

(Otro regalito de Mister Ross)

Día 06 de Febrero de 2006

Creo que debí empezar este blog hablando precisamente de Wonder Woman, pero me resistí por considerarlo un ejercicio más denso y profundo que el anterior. Pero era necesario que le llegara su turno y hela aquí.

Antes de adentrarme en la historia mítica de Wonder Woman quiero retorcer un viejo adagio para poder iniciar con propiedad esta biografía. “Detrás de toda gran mujer hay un gran hombre”, aunque en la vida real esto diste mucho de ser cierto en personajes tales como Margaret Tatcher, para el caso de Wonder Woman se ajusta perfectamente.

PADRE

William Moulton Marston fue ante todo un creador multifacético, se podría decir que su historia se compone de tres momentos fundamentales, uno como científico, otro como pervertido y el último como dios mitológico. A continuación las explicaciones a esto:

Moulton, de profesión psicólogo se dedicó de lleno a la investigación desde la psicología conductual durante los años 30’s y 40’s y su mayor aporte para la ciencia (y más que todo para la ciencia forense) fue la creación del primer detector de mentiras cuyas bases fundamentales siguen siendo vigentes en nuestros días.

Por otro lado, el señor Moulton tenía una faceta no tan aplaudida por la comunidad científica: su declarada inclinación por el sadomasoquismo, misma que mantuvo en una relativa clandestinidad pero que era obvia para todos. El señor Moulton, tan metódico y científico cultivaba una fuerte tendencia a excitarse viendo mujeres sometidas y esclavizadas, hoy en día este derivado del sadomasoquismo es conocido en el mundo pervertiril con el nombre de Bondage.

Y por último, la faceta cumbre de este personaje fue la de dibujante y guionista de cómics, faceta que lo convirtió de repente en el primer dios olímpico moderno, pues nos regaló a su más grande y mítica creación: Wonder Woman, también conocida como Princesa Diana, perteneciente a la raza de las Amazonas.

(otra joyita de Mr Ross)

MADRE

La historia de la mujer más poderosa de la Tierra es bastante extensa, tanto que fue otra de las heroínas que se sometieron al reencauche ya citado en mi otro blog de las Tierras infinitas; sin embargo, puede decirse que en términos generales su origen y continuidad argumental no fueron tan manoseados como el de otros héroes clásicos.

Por definición en la tradición mitológica griega las Amazonas eran guerreras que habitaban las selvas y que se dedicaban a las nobles tareas de cazar, pescar, cultivar, capturar hombres, violarlos, comérselos encebollados y luego seleccionar las crías féminas y pasar a cuchillo a los niños.

De este no tan amable cuadro Moulton tomó las ideas más rescatables de las Amazonas y concibió una historia más favorable para el género femenino. En la mitología “Moultoniana” las Amazonas son guerreras indómitas que poseen un bastísimo conocimiento y una fortaleza y longevidad que raya en la eternidad.

La primera Amazona según cuenta Moulton de nombre Hipólita lucha contra el poderoso Hércules en una batalla en la que sus compañeras son diezmadas pero salen victoriosas. El resentido y astuto héroe seduce entonces a Hipólita y mediante engaños logra someterla poniéndole unos grilletes mágicos forjados por Vulcano.

Las pocas Amazonas que quedan son masacradas pero Hipólita rompe las cadenas más no los brazaletes y logra escapar. Encuentra refugio en una isla perdida en el Atlántico a la que bautiza como Isla Paraíso. Allí la solitaria Hipólita se vale de sus ancestrales poderes para forjar del barro toda una nueva generación de Amazonas, eso si, cada una llevará para siempre brazaletes mágicos en recuerdo de la traición de los hombres.

Una de las figurillas moldeada por Hipólita será como sospechan Wonder Woman y se destacará de las demás por su belleza perfecta y sus cualidades que la llevan a superar incluso a sus demás hermanas.

Con el correr de los siglos, la Isla Paraíso crece en avances tecnológicos, las Amazonas llegan incluso a tener contacto con entidades extraterrestres de las cuales la más importante para la vida de Diana Prince será la de los Lasaranianos, quienes regalan a Hipólita una extraña sustancia moldeable y casi invisible capaz de adquirir la solidez del acero y que seguro recordarán en su diseño más moderno: El avión invisible.

En el próximo post entraré de lleno en la agitada vida de esta heroína y en la manera como Moulton logró integrar sus demonios y saberes para dar a este personaje ese toque de realismo que la ha mantenido vigente desde principios de los 40’s hasta nuestros días.